El desafío de la Fotografía Pauly Sanchez, noviembre 21, 2015octubre 6, 2023 Me han preguntado muchas veces que es lo que quiero conseguir como fotógrafo o que es lo que quiero lograr con mi fotografía. Y debo reconocer que mi motivación tiene que ver con mi poca y mala memoria. He vivido en varias partes, me cambié de colegio algunas otras, cambié la ciudad y hasta el país, y con las cosas pasando tan rápido, para mí ha sido muy difícil recordar todos los lugares que conocí, todas las personas con las que compartí, las calles donde caminé, los museos que visité, en fin.. Y lo peor es cuando la familia te dice: “Te acuerdas de ese paseo que hicimos por la laguna….” Y al no recordarlo, se enojan con uno porque creen que estas mintiendo. Recuerdo muchas cosas, que no se mal interprete, tengo recuerdo muy claros de muchas situaciones de mi vida, recuerdo nombres, fechas y contextos completos de cómo sucedieron algunas cosas… pero me gustaría recordar con detalles la “casaclub” que teníamos cuando chicos, o “el esqueleto de camión” al lado de la biblioteca, donde pasábamos el rato cuando era (aun más) chica. Hoy, y gracias a Dios, si puedo hacerlo. Me motiva registrar las cosas que hago, las cosas del día a día, los ratos con los amigos, las actividades nuevas. Hacer que los momentos comunes se transforman en arte de la manera que YO los ví y los viví. Lo que más me costó al empezar a “fotografiar la vida”, fue sacar la cámara delante de todo el mundo y que todos preguntaran sobre las características, o que se especulara sobre el precio del equipo, o el típico “ooohhh!” cuando usaba el “zoom” (teleobjetivo). Al ser inevitable, aprendí que los que no tienen el hobby o por la fotografía o por el cine, no pueden reconocer la diferencia entre equipos profesionales (de miles y miles de US$) y los semi-pro. Yo tampoco podía. Y aproveche eso en mi fotografía, involucrar a los “actores” de tal manera, que se sintieran parte de la escena y así obtener mejores imágenes . Para motivarlos, les comento sobre las diferencias de los equipos, si debo sacar el flash, le explico sobre el funcionamiento de la luz y o la luz rebotada. Cuento anécdotas de otras sesiones u otros “cumpleaños”. Y varias veces les muestro a los fotografiados las diferencias entre una fotografía espontánea y la “posada” (dirigida). Cuando das el mismo discurso varias veces, se va perfeccionando, con el ejercicio de involucrar a las personas en tu fotografía a medida que vas sacando el equipo, te permite también mejorar tus habilidades sociales y hace que aprendas a dirigir el sujeto. Nunca olvides que no es lo mismo “mirar para arriba, sólo con los ojos” que “mirar para arriba, sólo con el rostro”. Lo que para ti significa algo, para el modelo puede que signifique algo completamente distinto. Nunca digas OBVIO, porque su resultado se ve en la fotografía. Compartiendo mi experiencia con el desafío de la fotografía Fui aprendiendo que para dirigir a un modelo o a un grupo de personas, es fundamental proyectar la voz, hablar fuerte sin gritar, variando frecuentemente la entonación y manteniendo un volumen adecuado para la habitación en la que estas. Ser asertivo, utilizar un lenguaje simple y directo siempre funciona. Si el modelo no da las expresiones que queremos, se le debe recordar que debe actuar el sentimiento utilizando todos los músculos involucrados en esa emoción Experimenta el desafío de la fotografía. Si vas a un lugar por primera vez, observa y sumérgete en el contexto. Fíjate donde está el protagonista de tu escena, si es que hay personajes que puedan causar conflicto y los amigos y enemigos. Fíjate si hay formas, colores, líneas o si vas a hacer retratos o planos generales. Pero por sobre todo toma atención en las personas, en sus personalidades. No te predispongas con la información que puedas tener de ese lugar o ese grupo de personas, si no que trata de verlo con tus propios ojos y trata de contar TU PROPIA HISTORIA. Si voy de viaje, trato de hacerme una idea de lo que puedo encontrar, pero no investigo mucho para sorprenderme durante el viaje. No hay una receta que funcione 100% en este desafio de la fotografía, siempre va a estar el ingrediente secreto o el que no sirve o el que funciona mejor según todas las otras variables de la fotografía. Pero lo que nunca falla es la captura de las emociones y sentimientos. Todas las imágenes que impactan visualmente serán aquellas que muestran emociones y evocan/provocan nuestros sentimientos. Por lo mismo debes ser apasionado en tu fotografía, así la historia irá apareciendo de a poco frente a tus ojos. En mi caso, la necesidad de experimentar la emoción en primera persona es lo que me hace elegir lo que capturo o no. El encontrar el estilo de fotografía es tan importante como encontrar tu propia personalidad. Es lo que te representará como fotógrafo ante el mundo y lo que diferenciará tu foto del resto. En esto también influye si te gusta conversar con la gente en la calle o si prefieres estar un poco más alejado, si te gusta tomar primeros planos o si prefieres el 70-300 detrás de los arbustos. TU ELIJES. Conversar con la gente, sobre todo si eres “viajero” (el turista visita, el viajero se involucra) te puede abrir puertas a lugares que no sabías que ibas a querer ir o te darán los datos que no aparecen en las guías de turismo. Finalmente, arriésgate, intenta ir a lugares donde es probable que no les agrades, sin embargo, si eres honesto y con buenas intenciones, debieras poder salirte con la tuya. En resumen, Saca muuuuuuuuuuchas fotografías Nunca dejes la cámara en la casa Captura las emociones Se apasionado y comprometido Experimenta la fotografía Encuentra tu estilo. Se comprometido, motivado, autodisciplinado y ten un objetivo claro. Enfócate en lo que quieres hacer y siempre visualiza lo que quieres lograr. Y corrige tus errores de siempre con practica, paciencia y dedicación. Foto1: Cajon del Maipo, Marzo 2012 Foto2: Integrante Emilly Autum Foto3: Alex Orellana, Baterista en Grupo La Horda Foto4: Los 60 en los 2000. foto opinion